Proyecto Axioma

En el marco de la investigación en torno al desarrollo y expansión de la ciudad, destacan situaciones clave que proporcionan una vista hacia el crecimiento oportuno del Barrio de Santa Ana. Dichas situaciones se describen bajo la necesidad de contrarrestar con los modelos jerárquicos y verticales de la ciudad consumidora, hacia una que promueve vínculos cíclicos y horizontales que aterrizan en lo regenerativo, la bioresiliencia y permacultura.

Con esto, se busca generar un núcleo intrabarrial que provee de espacios públicos, espacios verdes y una comunidad diversa e involucrada en su entorno local inmediato. Esta exploración se gesta a partir del entendimiento que el Barrio de Santa Ana se entreteje en una red de dinámicas socio-culturales; un círculo de servicios económicos y equipamiento; la disponibilidad y potencial de infraestructuras urbanas; y una serie de riesgos nacientes de la crisis climática, que naturalmente nos orientan hacia la construcción de un ecobarrio, abundante en servicios ecosistémicos y enraizado en la Tierra.

En ese tenor, hemos llegado a la creación del concepto de la ciudad atómica, que establece una analogía entre el modelo cuántico-atómico, para describir la existencia, movimiento y relación transversal y energética entre los componentes del átomo con su núcleo, así como también con otros átomos. Así, podemos visualizar a la mancha urbana como un compuesto, hecho de moléculas, hecho de átomos, que fungen como ‘micro-ciudades’ por sí solas, con un núcleo y una serie de orbitales que disponen al habitante con todo lo necesario para supervivir de manera sostenible.

Claro está que un proyecto de este carácter involucra a la colectividad, mientras que se desmantela la idea del contrato monetizado. Así se celebra la participación voluntaria, el intercambio incentivado con objeto social-productivo, por el beneficio agregado de cualquier práctica económica. En ese sentido, los actores del proyecto contemplan a los residentes, vecinos, centros educativos, gobernanza (municipio), servicios de alimentos, empresas dedicadas al reciclaje, entre otros giros productivos.

Nuestra estrategia urbana busca diluir la economía lineal, dando momento a la economía verde, para crear potencial simbiótico con, desde y para la naturaleza. Es con esto que los productos/proyectos germinados de nuestro proyecto contemplan a la comunidad aportadora, creadora y autogestionada que: recicla los residuos generados internamente en el barrio, promueve las capacidades y conocimientos de integrantes de la comunidad, la intervención con arte urbano y bioconstrucción para la regeneración del espacio público del barrio, la generación de alimentos por medio del huerto urbano, talleres para la cohesión social basados en la naturaleza y la restauración de baja escala de la masa vegetal barrial, etcétera. El enlistado lógico del proyecto se conjuga para establecer un punto de encuentro dinámico que ve por el desarrollo biosocial interno de Santa Ana.

En consecuencia, la nueva visión del barrio planea una serie de amenidades verdes y benéficas que: integran multi-generacionalmente a la comunidad, proveen espacios comunes detonadores de paz, tranquilidad, desarrollo del potencial integral de la persona-comunidad, servicios ecosistémicos y belleza.

Para mantener en ciclo al proyecto, se debe evitar: saturar las capacidades de procesamiento de residuos, talleres y dinámicas aglomeradoras; evitar procesos burocráticos dentro de la autogestión del proyecto (en los vínculos administrativos internos-externos) para fomentar una comunidad comprometida e involucrada; evitar la monetización y capitalización absoluta y evitar la negación directa a cualquier persona (toda voz será escuchada).

Por tal suma, nuestro proyecto goza de los frutos de un árbol de valores entroncados en el medio ambiente, la responsabilidad, la amabilidad, la comunidad y que está orientado al bienestar y el reconocimiento de lo propio, lo de otros y lo natural. En armonía, el proyecto que aquí desarrollamos será la síntesis constructiva hacia la ciudad atómica: un espacio de, por y para todos.